miércoles, 25 de diciembre de 2013

BUENOS PALADARES

CRÓNICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA

MUJER        
PILAR HURTADO
(DICIEMBRE) LA MAR (Av. Nueva Costanera 4076, Vitacura,  fono 2206 7839)Elegimos tres entradas para picotear mientras conversábamos. Una de las grandes gracias de La Mar es el estilo de su servicio, alegre y eficiente. También su ambiente siempre animado y con música, como que solo falta la arena en los pies para estar gozando de una playera cebichería limeña, cosa que nos encanta. Estoy un poco cegueta, pero cuando llegaban nuestros platos me pareció ver entrar a Don Francisco. Sí, era él, con lo que podemos inferir que no solo le gusta Doña Tina sino también un buen tiradito. Vuelvo a nuestros tres platos: un cebiche de la calle, con lapas y caracoles, todo picado pequeño y que encontramos muy salado. Otra opción fue una jalea con mariscos y trozos de pescado frito sobre tomate, cebolla y choclo peruano; traía yuca frita, anillos de calamar, choritos con su concha fritos (se ven muy lindos, pero si uno no se fija, se puede quebrar un diente) y menos pescado del que nos hubiera gustado. Este plato también cargadito a la sal, pero con la fritura se nota menos. El tercer plato fue tiradito al rocoto, de pulpo y pescado muy correcto. Para cerrar pedimos picarones, muy ricos y crujientes con harta miel de higos.”

 
WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(DICIEMBRE) FORTUNATA (Vitacura 3325, fono 23660123): “Hay movimiento en los bajos del edificio Titanium en Vitacura. Más de algún local con gracia y, por desgracia, demasiado bullicio. Por eso la opción de comer fuera de Fortunata no fue la mejor, pero bueno. El ruido no le impidió al mozo ser extremadamente atento y operativo, en una visita a este local de pastas con sus bemoles.” “Para empezar, un par de copas de vino y un carpaccio ($4.900) rico pero algo heterodoxo, con queso en lascas y alcaparras, pero también con una ensalada de hojas y algo de endivias.” “De fondo, dos pastas. Primero unos sorrentinos de calabaza asada y ricotta, con mantequilla a la salvia ($5.300), dulcecitos y fragantes. Del verbo delicado. Y luego una lasaña campesina, con ragú de asado de tira y espinaca, en las antípodas del otro plato. Mucho queso y el asado de tira con poco sabor, algo inédito.”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(DICIEMBRE) LE DUE TORRI (Borderío, Mons. Escrivá de Balaguer 6400, fono 2247 8484): “En BordeRío hablan dos idiomas: platos clásicos y platos BordeRío. Los primeros siguen la tradición fina, sobria y armónica de Italia. Los segundos son gusto chileno, más golosos, complejos. En ambos lenguajes, los platos son abundantes -si no está por comer hasta perder el conocimiento, una entrada compartida y un fondo por nuca bastan; los postres también son grandes-. Aunque cada sucursal tiene carta propia, en todas hay cappelletti di pollo in brodo ($7.850), recomendabilísimo plato boloñés.” “Un fondo clásico: agnelotti con burro e salvia ($10.500); pasta perfecta; fresquísimo relleno de ricotta y espinaca; mantequilla bien batida, abundante salvia fresca. El otro fondo, lenguaje BordeRío: lasaña de berenjenas (en lugar de pasta), con champiñones, pesto y queso ($9.950); plato excelente, generoso, y liviano.” “Magníficos ambos lenguajes. La pasta se hace en público: garantía de frescura. Excelente servicio. Solo echamos de menos los antipasti de Isidora Goyenechea.”