martes, 18 de marzo de 2014

BUENOS PALADARES

CRÓNICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA    

UNO COME
CARLOS REYES
(MARZO) EL BARRIO (Alonso De Córdova 4263, Vitacura, cel 5468 3531) “…un espacio informal, con servicio rápido –muy rápido- cocina sencilla y con cierta elegancia, aparte de una disponibilidad de vinos y cocteles de respeto, bajo una ambientación moderna y ágil. Hay pastas –como unos consistentes ñoquis-, carnes y pescados del día, dentro de una carta breve y precisa. Lo que llama la atención son los precios muy competitivos (ningún plato supera los $ 10.000) en relación en dónde está ubicado. Esas cualidades lo tienen transformado, al cierre de esta edición, en el lugar de moda en Alonso de Córdova por su lógica de gastropub (lo que la lleva en el mundo: un pub especializado vender comida de calidad, no como el inmundo La Jardín que nos engrupió a todos). Un sitio que por nuevo, ágil, amable y correcto para comer, es el lugar de moda para dejarse ver, que requiere reserva previa.”

MUJER
PILAR HURTADO
(MARZO) PROBOCA (Manuel de Salas 162, Nuñoa, fono 2723 8954): “El pulpo a la parrilla con salsa anticuchera es muy sabroso y el pulpo no es blandísimo, pero su punto está bien. Acompañado de papas doradas y salsa criolla (cebolla morada con ají y limón). El tiradito de pescado, clásico y con solo reineta, limón y salsa de ají, estaba bien rico; con choclo peruano desgranado y trozos de camote. El tercero fue un chicharrón mixto de pescado, calamares y camarones arrebozados y fritos, que se acompaña con salsa tártara. En este caso venía una mayonesa de las envasadas arreglada con perejil. Pero le faltaba mínimamente el huevito duro de la salsa tártara (sin contar los otros ingredientes), así que también pedimos que lo arreglaran.” “Antes de irnos pasamos a conocer el local, y otro chico peruano nos hizo amablemente el tour explicando todo, otra prueba de una buena atención.”

QUÉ PASA
DANIEL GREVE
(MARZO) TIERRA NOBLE (Reyes Lavalle 3310, Las Condes, fono 2232 4797): “A este congrio le dejaron un ojo en tinta. Enhorabuena. Porque la pericia del chef Juan Pablo Valdivia, del restaurante Tierra Noble, hace que un jugoso Congrio dorado a la parrilla ($9.500) llegue perfecto, sellado, con la delicada y pálida carne luciendo su brillo, y se deje acompañar por un Risotto al dente ($4.100) con calamares en su tinta, cocinado con bisque de camarones y terminado con mantequilla y parmesano. El arroz, de un negro profundo, pastoso, complementa la intensidad de este pescado tratado como carne roja, ahora que el otoño comienza a mostrar colmillos y queremos bocados que nos arropen.

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(MARZO) CARRER NOU (Miguel Claro 1802, fono 2727 1161): “Comenzamos con un delicioso y refrescante "salmorejo" ($2.200): crema fría de pan, tomate, ajo y aceite. Seguimos con caracoles "Can Barris" ($6.200): cocidos en tomate con butifarra; una buena porción, más que de entrada. Y una tortilla de papas ($3.700), que pedimos bien seca, que pudiera echarse a rodar sin desarmarse, como debe ser: llegó perfecta. Nada de tortillas "babeuses" ni blandengues. Pasamos todo esto con una sangría excepcionalmente bien hecha, que venden por copas y por jarras de un litro ($9.900, y los valen). El "pa amb tomaquets" (pan con tomate) no estuvo a la altura de otros que hemos comido en Cataluña; pero malo no estaba.” “Alentadora la brevedad de la carta de fondos (la de entradas y picoteos es más larga; señal de que aquí muchos vienen "de tapas"). Probamos el mero "Ondarroa" ($9.900), con salteado de habas y jamón; sabroso contorno, que no apabulló al pescado. Luego, un "cachetazo" ($9.700): plato de cachetes de congrio al pilpil (el auténtico; no al ajillo, con el que en Chile lo confunden), con camarones, aceitunas y arroz; plato bien picante, pero perfectamente tolerable y armónico.” “El servicio, rápido y amable, está bien informado de los platos, de sus ingredientes, de su confección; cosa insólita en Santiago.”

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(MARZO) LE SUQUET (Santa Isabel 0438, fono 2225 6301): “Este es un espacio sencillo, con personal muy atento e involucrado en lo nacional. Pero, ojo, si alguien pide un Barros Luco de la carta, que respondan que no es venezolano es obvio. Entonces: o se opta en un 100% por lo étnico o no, ¿Ok?” “Para picar, una tabla venezolana, surtida de tequeños (masas muy calientes, con queso en su interior), pequeñas empanadas de masa de maíz rellenas de pollo con pimentón, y arepas (tortillas gruesas de maíz) con queso y demases. Una cosa buena para esperar, lejos más sabrosa que una panera. Para acompañar, limonada endulzada con chancaca (papelón), a $1.800, o una malta analcohólica, $2.000.” “De fondos, un asado criollo ($6.900), con carne a la cacerola con salsa negra (agridulce), MUY seca, con arroz y plátano frito. Y, además, un pabellón criollo ($6.250) con carne a la cacerola deshilachada, arroz, plátano frito y ensalada. Ninguno de los platos sería un muy buen competidor en un imaginario certamen bolivariano de qué representa -con hidalguía- a cada nación de nuestro continente.” “Ojalá que afinen la cocina entre cabeza y rabo, porque la gentileza sobra en este lugar.”