martes, 14 de febrero de 2017

MIS APUNTES


 
OPORTO
Buenas novedades
 
Pronto a cumplir 10 años, el Oporto merece una crónica que va más allá de tener una de las terrazas más onderas de la capital. En este tiempo han definido su target y no se han desperfilado de la idea original que tuvieron los hermanos Pubill cuando decidieron abrir en Isidora Goyenechea un producto único y diferente a lo que existía en aquellos entonces en el mercado gastronómico.

Fui (y sigo siendo) uno de los críticos con la iluminación del lugar. Sigo creyendo que un buen plato de comida necesita iluminación adecuada para poder ocupar los cinco sentidos en el acto de comer. Aun así, les saco el sombrero ya que nunca variaron su modalidad y han conseguido con el transcurso de los años una ferviente hinchada que acude frecuentemente al lugar. Por estos días están remodelando (sin cerrar sus operaciones), esperando tener concluido en marzo todos los cambios.

Y lo que se viene, promete. Más mesas en la tarraza reemplazan los mullidos sillones ya que la idea es ocuparla no sólo para tomar un cóctel sino también dar la oportunidad de degustar platos creados por una de las más diestras manos que hemos tenido en nuestro país en estos últimos años. Un risotto de mariscos con azafrán y otro de champiñones que acompañaba un blando y jugoso steak de Angus, me reconfirmaron que en el Oporto la comida será parte muy importante de su éxito.

La música electrónica no cesa en la terraza estos meses de verano. Allí se concentra el 90% del público que llega al restaurante a cenar o beber una copa donde destacan variados cócteles de ayer, hoy y siempre. A mediodía es diferente ya que los profesionales que pululan y trabajan en el sector se sienten muy atraídos por una opción ejecutiva de almuerzo a valores bastante razonables. Aun así, el peak de clientes comienza a aparecer cuando comienza el ocaso y la iluminación del sector convierte esta terraza en un parador imperdible.

El diseño de esta nueva etapa está a cargo de Gino Falcone, autor de una serie de restaurantes capitalinos, dueño de Sarita Colonia y de profesión arquitecto. La nueva propuesta está avanzada y se podrá vivir intensamente tras el retorno de las actividades en nuestra capital.

Desgraciadamente no tengo la autorización para contarles el nombre del cocinero que está a cargo desde el mes pasado. Por el momento dejémoslo trabajar y buscar los mejores equilibrios para la creación de su nueva propuesta. Estoy seguro que de mantenerse en el lugar, el Oporto volverá a ser parte importante del circuito gastronómico de la ciudad y será una tremenda ayuda al barrio Isidora, cuyos vaivenes gastronómicos todos conocemos. (Juantonio Eymin)

Oporto: Isidora Goyenechea 3477, Las Condes / 22378 6412