martes, 31 de octubre de 2017

MIS APUNTES


 
CATAE
Otra vuelta de tuerca
Los restaurantes hoteleros son, en su gran mayoría, un problema para un complejo cuyo negocio es vender habitaciones. Sin embargo las cadenas internacionales –y algunos establecimientos locales- que aspiran a lograr las 5 estrellas, deben invertir dinero en el posicionamiento de uno o más restaurantes, algo que no siempre es recompensado.

 
Cuando llegó a Santiago el hotel Renaissance, en la actualidad una marca de la cadena Marriott, se esmeraron en diseñar un restaurante a todo nivel, que estrenaron en el 2014 bajo la marca de Catae y con el argentino Mariano Cid en sus cocinas. Una gastronomía de vanguardia que rápidamente conquistó el paladar de los clientes y pasajeros del hotel. Tras el alejamiento de este cocinero, el sous chef de esos entonces, Mariano Bambacci –también argentino- demostró su talento gastronómico, pero debido las dificultades económicas de las cocinas hoteleras, decidieron darle una vuelta de tuerca al restaurante y poner en él a un chileno, David López, con experiencia en el Ritz Cartlon capitalino y por años parte del equipo del chef Tomás Olivera, que está orientando la gastronomía de este lugar hacia una realidad más chilena y con menos artilugios que los chefs anteriores.

A precios más asequibles, la nueva –y primera- carta de David López pone énfasis en la cocina chilena tradicional con productos de calidad. Un paseo de aromas y texturas que entusiasma a los clientes como  su Quínoa de colores (6.900), una preparación en que tres tipos de quínoa -blanca, roja y negra- sirve de cama para un huevo pochado y una mini ensalada crocante a base de berros, zanahorias y apio, todo ello junto a pequeños trozos de charqui de vacuno. Una vez que el huevo se revienta, los sabores se integran potenciando los sabores del conjunto. Un plato rico y posiblemente una de las mejores versiones de quínoa que haya probado en años.

De fondo, Osobuco en su jugo (13.200), una versión libre con un gran hueso de médula trabajada con mantequilla y aceite de trufas, sobre una cama de puré rústico, vegetales y chimichurri. Si bien el día de mi visita la médula no logró el sabor deseado ya que la técnica ocupada no fue la ideal, el producto promete buenos momentos para los amantes de este corte de vacuno.

Al postre, una versión original de Papayas a la crema (5.100) con hojas de masa philo y todo el sabor de las papayas conserveras de la IV región.

Carnes, pescados, pastas y risottos complementan una carta amable para quienes visiten el lugar.  El comedor es espacioso y lleno de detalles agradables. Buen servicio y una carta de cócteles y vinos acorde a un buen restaurante hotelero. (Juantonio Eymin)

Catae / Renaissance Santiago Hotel /Av. Kennedy 4700, Vitacura / 22678 8888